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Mis problemas con la educación en México

Mrsq19 | Mayo, 2020


Nota: El siguiente ensayo posee opiniones con las cuales ya no estoy de acuerdo. Tomar el ensayo con discresión.

Todo lo que se expondrá a continuación será un artículo que espero no sea tan largo, pero que pueda explicar de forma completa mis problemas con la educación, junto a una propuesta para solucionar dichos problemas, pese a que me vayan a tomar por loco o incompetente en el ámbito escolar, pues por alguna extraña razón en México (y sospecho que en Latinoamérica) tienen a la educación en un estandarte del cual es necesario que lo quiten.

.- La culpa (también) es del profesor.

En mi escuela siempre nos suelen meter en la cabeza que nosotros somos los culpables de andar reprobando materias. En parte tienen razón, pero ¿Por qué aún cuando estoy dando mi mayor esfuerzo y sacrifico mente y alma para siquiera poder pasar, sigo reprobando?

Nunca he sido un alumno de excelencia, pero tampoco soy una vergüenza ni un desastre. Soy un estudiante que siempre busca tener como nota mínima un 7 u 8 dependiendo la materia; pero el ser un alumno académicamente excelente no es sinónimo de ser una persona brillante o siquiera competente. Esto entonces implica que no importa si soy un alumno con notas deficientes, mi opinión mientras mejor argumentada es más valiosa; lo menciono sobre todo si eres de aquellas personas que trata de desacreditar la opinión/análisis de otra persona solo porque sus calificaciones no son de excelencia, porque es una falacia.

Sin embargo, todo lo mencionado sobre las notas no es para restar importancia como tal, porque en la escala de evaluación si sacas menos de 6 estás reprobado, implicando que has demostrado que no posees el suficiente conocimiento como para considerar que has aprendido. Mi problema empieza cuando vemos que quienes nos evalúan si aprendimos lo suficiente o no son los profesores; en México no hay como tal una forma de evaluar si un profesor es competente o no en el ámbito de la enseñanza, por lo que casi cualquiera puede enseñar. Una muestra de ello es que por obligación te has topado mínimo a un profesor que no sabe enseñar pero te aprueba pese a que no hayas aprendido nada en la clase, muy pocos profesores que se toman en serio el campo de la enseñanza, y el que más detesto: un profesor que sabe mucho pero no está capacitado para enseñar.

Sin embargo, todo lo mencionado sobre las notas no es para restar importancia como tal, porque en la escala de evaluación si sacas menos de 6 estás reprobado, implicando que has demostrado que no posees el suficiente conocimiento como para considerar que has aprendido. Mi problema empieza cuando vemos que quienes nos evalúan si aprendimos lo suficiente o no son los profesores; en México no hay como tal una forma de evaluar si un profesor es competente o no en el ámbito de la enseñanza, por lo que casi cualquiera puede enseñar. Una muestra de ello es que por obligación te has topado mínimo a un profesor que no sabe enseñar pero te aprueba pese a que no hayas aprendido nada en la clase, muy pocos profesores que se toman en serio el campo de la enseñanza, y el que más detesto: un profesor que sabe mucho pero no está capacitado para enseñar:

"Ustedes solos se reprueban".

Mucha gente se cree ese palabrerío, yo no. Antes escuchaba esa frase y me decía "es verdad, no me he esforzado lo suficiente", y después por más esfuerzo que ponía acababa resultando lo mismo y reprobaba. Y es que todos aquellos que se siguen creyendo esas palabras son los mismos que, literalmente han dejado de lado sus vidas para dedicarse solamente a pasar esa materia y poder reinscribirse al siguiente semestre o directamente para que les den su certificado y puedan pasar a la universidad o para poder postularse a un trabajo.

Es ahí cuando entre ideas, llegué a la conclusión perfecta, y es que justamente tratan de excusar su incompetencia culpando al alumno, cuando realmente en estos casos específicos no es su culpa siempre y cuando esté esforzándose. Por eso mi primer problema con la educación en mi país es que la culpa también es del profesor.

.- Menos profesores exigentes

Anteriormente mencioné que los profesores incompetentes y/o exigentes tratan de excusarse diciendo que es culpa del alumno, pero ¿Por qué?. Simplemente no es mi trabajo hacer el de ellos. Es evidente que el trabajo de un profesor como tal es el de enseñar y retroalimentar. En un profesor exigente no existe ni una ni la otra, pues no sabe enseñar y a la mayoría les molesta asesorar a los alumnos, y si se dignan a retroalimentar o resolver dudas , por lo mismo de que no saben enseñar acaban confundiendo más a los estudiantes y ahí es cuando el maestro se digna a ser más exigente, pues "ya les dije lo que tienen que hacer".

Y no, que un profesor sea exigente con sus trabajos no necesariamente lo hace bueno, y ese es un problema que muchos no entienden o simplemente justifican.

Ahora, por el lado opuesto: que un profesor sea flojo o "barco" (cuya clase sea fácil de aprobar) tampoco es bueno, pues no aprendes básicamente nada pese a que en el sistema ya posees dicho conocimiento; pero con estos profesores no me puedo quejar mucho y de hecho me suelen agradar más, pues mínimo con ellos puedo tomarme un respiro para poder estudiar y aprender lo que ellos no me están enseñando. Básicamente con estos profesores puedo aprender a mi ritmo y lo único que me limita es mi capacidad de aprender.

Es por esto por lo que no me quejo con este tipo de profesores, e incluso los prefiero por sobre los exigentes. El motivo sonará estúpido pero al menos todos los profesores "barcos" con los que he tenido clases me siento a gusto, aprendo a mi ritmo, y sobre todo sé que estos profesores no me calificarán cosas que ni siquiera hemos visto, y si lo hacen no le pondrán tanta importancia. ¿Que estoy haciendo su trabajo? Tal vez, pero mínimo no me anda molestando y en parte no estoy haciendo su trabajo porque solamente me está enseñando lo que él quiere evaluar. Caso contrario con el exigente, pues me está pidiendo más de lo que él me está dando.

Ahora bien, para este punto podrías decir "Es absurdo que digas eso porque los profesores flojos son los más incompetentes". Nunca he negado dicha afirmación, pero si todos aquellos que contraargumentan a alguien que se queja por un profesor flojo, siempre utilizan la misma excusa de "Es que tienes que aprender a ser autodidacta, no todo se te dará a la mano", pues yo también puedo excusarme diciendo que con este tipo de profesores como mínimo me doy la dicha de ser mejor autodidacta que con uno que solo sabe exigir, pero no da la talla.

Aunque, por contraparte, un profesor “barco” no es para nada una buena idea a final de cuentas, pues acabarás pagando factura más adelante, cuando esos conocimientos que necesitas no fueron bien enseñados. La clave es y será siempre el balance correcto entre un profesor que enseñe de forma eficiente su temario y que evalue de acuerdo a lo que se ve durante el curso. Pero si uno se pone a considerar ¿Cuál es el mal menor? La respuesta que considero correcta siempre será el profesor “accesible y barco”.

.- ¿El sistema o los docentes?

Hasta este punto me he extendido demasiado, pero debo de resaltar que no estoy tratando de ser un anti-sistema, pues sé que estoy hablando de casos particulares. En sí veo que casi todos los que conozco están conformes con el sistema educativo, o como mínimo no ven todo esto como un problema que haga saltar las alarmas. Puede que sea porque sus mentes ya están moldeadas a la par del sistema; además, varios que sí llegan a quejarse sobre el sistema educativo, la forma de enseñar o en algún docente en específico, terminan tachándolo de vago o flojo porque "le pesa hacer tareas" o "de seguro estás reprobando", siendo estas falacias tan comunes que suelen ser excusas que usan padres, alumnos e incluso los mismos profesores, los cuales deberían de ser tus aliados.

Todas aquellas personas que se suelen quejar de la educación, además de ser rechazadas por motivos injustificados, suelen terminar aceptando dicho sistema más que nada porque prefieren ser maltratados antes que hablar, sobre todo porque estos mismos sufren el mismo miedo: que los puedan reprobar o dar de baja de sus escuelas y tener que repetir todo desde cero.

También es claro que no cualquier persona que critique el sistema educativo tendrá la razón de forma arbitraria, sino que dependerá de sus argumentos el qué tan justificable es su crítica. En lo personal creo que todos tenemos quejas con el sistema educativo, pero al pensar que no hay soluciones o alternativas decidimos dejarnos moldear a la par de “ingenieros con mente de técnicos”.

Esto lo menciono sobre todo porque pese a que quisiera un cambio en este sistema que compensa al más obediente sobre el más listo, reconozco que (al menos por un buen tiempo) no llegaremos a solucionar estos problemas, pues si el docente suele ser un insensible con el alumnado, es gracias a que el mismo sistema educativo no premia al profesor que sepa enseñar, sino al que siga las normas ya establecidas; motivo de por qué los profesores te siguen enseñando el mismo plan de estudios de hace 10 o 20 años pese a que toda esa información ha sido, o actualizada o refutada.

.- Ser autodidacta no es la solución

Si por cada que escuchara a alguien decirme "es que no todo te lo enseñan en la escuela, debes de ser autodidacta" me dieran un dólar, entonces probablemente ya podría costearme una vida. Mucha gente cree que siendo autodidacta se resuelven todos tus problemas, pero si en este artículo he escrito una parte que literalmente habla sobre por qué prefiero un profesor flojo sobre uno exigente, es porque yo mismo entiendo que el ser autodidacta es una vía alterna, pero no la solución.

El problema de toda esta gente que da por sentado que la solución es ser autodidacta es que eso no soluciona el problema de las evaluaciones, pues puedes aprender todo sobre electromagnetismo, las leyes de mendel, graficar todo tipo de formas/figuras solamente conociendo la función, pero nada de eso quita que aquel que dará el veredicto final sobre si apruebas o no es a fin de cuentas el profesor.

Si, puede que siendo autodidacta y aprender todo por tu cuenta funcione y el profesor te pase, pero debemos de recordar que mi mayor problema son los profesores exigentes, y usualmente son estos los que, para no sentirse que fueron superados, terminan poniendo más peros. En varias ocasiones demostré ser capaz de tener los conocimientos necesarios, pero en todas y cada una de las situaciones me ponían cualquier “pero”. Es gracias a este tipo de comentarios de los mismos profesores por los que los estudiantes suelen despreciar las asignaturas, suelen agobiarse por que no "entienden algo", y peor aún, suelen pensar que ellos son los incompetentes; los mismos docentes son los que manipulan al alumno para creer que ellos son los del error.

Por lo que en resumidas cuentas, el ser autodidacta no resuelve que por culpa de un profesor incompetente puedas llegar a perder un año entero y así no puedas salir como alumno regular, o en otro caso, con tal de obtener el paper que es requisito para entrar a la universidad; todo esto pese a que has demostrado tener todas las habilidades y conocimientos necesarios para poder entrar a estudiar lo que verdaderamente te apasiona (en teoría).

.- Conocimiento obsoleto y poco útil

¿Nunca te ha pasado que estudiaste contaduría, trabajas en una oficina y en una reunión el cliente te pide que le digas cuántos electrones posee el elemento "carbono"? Si no te ha pasado, entonces felicidades, entonces posiblemente nunca ha tenido que usar conocimientos fuera de tu rama de estudios

Ese es el que considero otro problema, ahora con el sistema educativo, pues en general mencioné que la mayoría de tu conocimiento está basado en un plan de estudios de hace 10 años que muy probablemente esté obsoleto o ya haya sido refutado. Todo esto sumado a que en su mayoría es conocimiento que ya no vas a usar en el futuro, cuando seas un trabajador.

Si, soy un firme creyente de que todos deben de aprender las matemáticas esenciales (Aritmética, álgebra, geometría, trigonometría, cálculo diferencial, cálculo integral, probabilidad y estadística), pero no veo necesidad de que todos estemos estudiando ciertas materias que todos por algún momento nos hemos cuestionado "¿Para qué me servirá esto?".

Este apartado es un tanto corto, pero es porque es fácil de razonar y por intuición todos sabemos cuales son esas asignaturas que sabemos que nos deberían de quitar de una vez por todas. Simplemente que en la rama de matemáticas te inculquen una cantidad considerable de materias humanisticas ya dice mucho.

.- ¿Qué hay de la educación en línea?

Ahora, uno se puede preguntar "¿Qué hay de la educación en línea?". Pues yo básicamente me pregunto lo mismo ¿Qué demonios con ésta modalidad?.

Internet fue ese invento que hace probablemente 10 o 15 años no estaba al alcance de todos, pero que ahora con el abaratamiento de las computadoras, la accesibilidad del teléfono inteligente, el ascenso del internet y demás, no comprendo por qué todavía seguimos siendo esclavos de un sistema que puede funcionar perfectamente si lo aplicamos al mundo de la educación en línea.

Quería que este artículo fuera atemporal, pero si quiero postular mi "tesis" de forma correcta, tengo que tocar todo lo sucedido durante la pandemia de la COVID-19. ¿Desde cuando pensábamos que los profesores; los mismos que te piden hojas y hojas de investigación, que te hacen desgastar un cuaderno que sabes que nunca volverás a agarrar, que siguen viviendo en el siglo XVIII; son en la actualidad más incompetentes que una empresa que ofrece cursos online pago, pero de alta calidad?.

Hasta este punto es cuando uno debe de cuestionar si de verdad alguien con título, maestría o doctorado debería de conservar su cédula aún cuando no sabe usar la misma tecnología que ha revolucionado nuestra forma de ver las cosas.

Yo tengo fe en la educación en línea, pero la mayoría prefiere seguir en el mismo sistema obsoleto. Les entiendo pues todo ese periodo de "educación a distancia" por el confinamiento no se puede (ni se debe) llamar una forma de educación en línea, porque una clase de ese tipo no es decirle a tus alumnos "Hoy toca ver el tema X, ahí les mando unos PDF's y me hacen un resumen, además de una práctica que consiste en aplicar dichos conocimientos. Todo para dentro de tres días". Ten por seguro que esos profesores no te quieren enseñar ningún conocimiento, sino que solo quieren que los dejen en paz y entregar cualquier evidencia de que "trabajaron".

La educación en línea es que el profesor haga material audiovisual propio, lo comparta a sus alumnos, les retroalimente por una sesión en línea, y una vez que haya impartido de buena forma los temas, haga cuestionarios o prácticas para evaluar a los alumnos.

"¿Cual es la diferencia?" me preguntarán, pero es que es más que evidente que cuando un profesor explica a partir de un video o una sesión en línea, se puede sentir la confianza de que el alumno no está investigando fuentes dudosas, además del plus de la retroalimentación que el profesor da. Mientras que mandar un PDF o video simplón no ayuda, pues si alguien llega a tener dudas del tema, además de que no sentirá cercanía con el profesor, muy probablemente no lo va a asesorar ni resolverá sus dudas, pues si está solamente mandando fuentes (que él mismo tendría que explicar) a secas, es porque evidentemente no quiere y lamentablemente no le interesa si el alumno tiene dudas o no comprende el tema, solo busca la salida fácil.

Ahora, referente a ese formato semi-híbrido donde las clases eran en horarios fijos como si estuviéramos en salones de clase pero a modo de videoconferencia: no se puede decir que eso en algún momento fue educación en línea, simplemente porque era un burdo intento de adaptar el formato clásico de horas de clase presenciales pero con mayores posibilidades de distracción. Afortunadamente esta modalidad está casi extinta salvo por contadas excepciones.

.- Una posible solución

Finalmente, debo decir que soy firme diciendo que la parte esencial de la educación es solamente los primeros 9 años de escuela (Omitiendo el kínder, porque no pinta realmente nada). Sabiendo esto, tengo que dar mi veredicto sobre el cómo podríamos solucionar todo este problema sobre el sistema educativo y todo lo que concierne a este. Mi idea sería la siguiente:

En dichos nueve años la cantidad de horas de clase deberían de ser recortadas con tal de que el alumno pueda meter asignaturas optativas dedicadas a la búsqueda de su especialidad académica. Lo que consideraría viable serían a lo sumo tres a cuatro horas semanales por cada materia.

.- Veredicto: No estamos listos para cambiar.

Toda charla que he tenido con todo tipo de personas siempre acaba siendo lo mismo: afirman que soy yo el que está mal porque muy probablemente soy el que está haciendo las cosas de mala forma, o creen que mi fin es el desacreditar X o Y institución, cuando realmente mi problema es el sistema que ha demostrado estar roto, pero que a final de cuentas seguirá funcionando así por un largo tiempo, pues siendo México un país donde el promedio de IQ es de 88, a la gente poco o nada le importa visualizar que si se aplicaran cambios al sistema y se quitaran todos los malos profesores, las cosas probablemente serían mejores.

Lamentablemente la mente de los jovenes ya está moldeada con tal de que se sigan creyendo el cuento de que "son el futuro del país", cuando muy probablemente serán aquellas personas que acaben doblegándose primero a un puesto de trabajo miserable, pero como en la escuela les metieron en la cabeza que mientras más exigente mejor, no darán marcha atrás a sus ideas, y eso es lo que me pone triste.

Repito, no quiero ser un anti-sistema y de hecho sé de antemano que la mejor forma de combatir dichos problemas es callarse y continuar cediendo ante un sistema que en sus épocas funcionaba para educar a los obreros... durante la primera revolución industrial. A final de cuentas todas estas palabras serán cuestionadas por aquellos que siguen creyéndose la mentira de que son inteligentes, y lo sé porque cada que alzo la voz y menciono todo lo redactado aquí, termino siendo yo el que queda mal, porque a final de cuentas "La ignorancia es fuerza".



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